Cualquiera que haya tenido contacto con el mundo empresarial seguro que ha oído hablar de este impuesto. Es uno de los homenajes más importantes en el día a día de una empresa.
Todo empresario debe ser consciente de sus obligaciones fiscales. Por lo tanto, profundizar en el conocimiento sobre ICMS es fundamental.
De hecho, no solo quienes emprenden deben conocer este impuesto, cualquier ciudadano común debe conocer el ICMS, ya que grava las compras, ventas, transportes y servicios en general.
En toda compra, el consumidor paga el ICMS. Luego, descubra cómo se aplica este tributo en la vida cotidiana.
Después de todo, ¿qué significa ICMS?
Para entender, en definitiva, el ICMS es el impuesto que recae sobre la circulación de productos. Convirtiéndose en una de las mayores fuentes de ingresos del estado.
La sigla significa Impuesto sobre Circulación de Mercancías y Prestación de Servicios de Transporte y Comunicaciones Interestatales e Interurbanos.
Su valor es determinado por los estados y el Distrito Federal, sin transferencia al gobierno federal. Es un impuesto fundamental para el mantenimiento de las cuentas públicas, para que estados y alcaldías viabilicen sus proyectos.
Existe legislación con lineamientos generales, sin embargo, los detalles de la ley son responsabilidad de cada estado.
¿Cómo funciona ICMS?
Al realizar una compra ya estás pagando ICMS. Esto se debe a que el impuesto ya está incluido en el precio del producto.
Se cobra aunque la acción no constituya una venta per se. Además de la compraventa, el ICMS también grava los servicios de transporte interestatal e interurbano.
También incluyen los servicios de comunicación y telecomunicaciones. De esta forma, el consumidor paga el ICMS indirectamente. A diferencia de las empresas que deben cobrar directamente.
¿Cuáles son los tipos de ICMS?
Hay 3 tipos de ICMS. Son ellos:
ICMS Normal: Forma parte del conjunto de impuestos que pagan mensualmente las empresas de tributación normal. Esto también incluye Simples Nacionales.
ICMS – ST: Se refiere a la sustitución de impuestos; recae sobre bienes específicos y operaciones interestatales.
Y, por último, tasa ICMS diferencial: recae sobre la compra de bienes de otros estados.
¿Cuáles son las características del ICMS?
Conoce cuáles son los factores que componen el ICMS:
Finalidad Fiscal: Lo caracteriza como un impuesto que tiene por finalidad la captación de recursos para el Estado. En este caso, es la principal fuente de ingresos del Estado.
Tributo Real: Esto quiere decir que es un impuesto que recae en materia tributaria. Es decir, se desconoce la condición personal de quien realiza la operación. Se trata del producto, no del consumidor.
Proporcional: Significa que el ICMS tiene tarifas que pueden variar según la base de cálculo. Los productos más básicos tienen tarifas más bajas, mientras que los productos considerados superfluos tienen tarifas más altas.
Y, por último, el ICMS se considera un impuesto multifásico, es decir, cae varias veces durante la cadena de circulación. Se cobra desde la operación del fabricante hasta el distribuidor, pasando al menudeo y terminando en el consumidor.
¿Quién debe pagar ICMS?
Como se mencionó, se paga en todas las operaciones de venta e importación de productos, prestación de servicios y transporte. En este último, incluye el ingreso de petróleo al territorio nacional, con ocurrencias en el valor de las gasolinas, diesel y otros derivados.
Su tasa varía de estado a estado, pero opera a una tasa del 17%. Por cada 100 reales que paga el consumidor, 17 reales van al Estado.
En el caso de MEI (Microempresario Individual) que estén relacionados con servicios que deban pagar ICMS, el pago se realiza directamente en el DAS (Simples Nacional Documento de Recaudación).
¿Quién está exento de cotizar con ICMS?
Prácticamente todas las transacciones de prestación de servicios deben pagar ICM. Pero, algunas empresas están exentas:
- Libros, diarios, revistas y otras publicaciones periódicas. Incluida la compra de papel para la fabricación de estos.
- ¿Qué exportaciones del país
- Operaciones con oro cuando se utilice como activo o instrumento de cambio.
- operaciones de arrendamiento
- operaciones hortícolas
- Operaciones de insumos agrícolas
- Adquisición de vehículos adaptados para personas con discapacidad física.
Para más información véase el art. 3 de la Ley Complementaria 87/96 – Ley Kandir. Y también el texto de la Ley Complementaria 87, que brinda mayores aclaraciones sobre el tema de la inmunidad. Diferente tema de exención.
¿Cómo pagar ICMS?
La empresa debe generar el comprobante de pago del ICMS. Para lograrlo basta con registrarse en la SEFAZ de la región de registro.
Con el registro, el empresario recibe un Registro Estatal, que confirma que la empresa es contribuyente.
Cada estado tiene su propia forma de registrarse. Por lo tanto, esté atento e infórmese con la Secretaría de su Estado donde está registrada la empresa para organizar sus documentos.
Finalmente, el pago se realiza a través de guías que deben ser emitidas en la página web del Departamento del Tesoro.
¿Cómo calcular ICMS?
Para calcularlo, necesita conocer la tasa practicada en el estado donde opera su empresa.
Después de averiguarlo, aplique la fórmula: Precio del producto X Tasa practicada en el estado = ICMS valor de la mercancía
En las operaciones realizadas entre estados, es necesario aplicar el DIFAL – Diferencia de Tasas. Esto se debe a que existe una diferencia entre las tarifas cobradas de un lugar a otro.
DIFAL es una tarifa creada con el objetivo de reducir la diferencia de ingresos entre estados. De esta forma, una región no se vuelve más atractiva que otra para los negocios, por lo que los ingresos se concentran en un solo lugar.
empresas que no pagaron ICMS? ¿Cuáles son las consecuencias?
Las empresas que no pagan ICMS quedan endeudadas con Hacienda y en mora.
En consecuencia, además de la cantidad en mora, la empresa está obligada a pagar los intereses aplicados y las posibles inspecciones.
¿Y cuáles son las consecuencias de la morosidad?
La morosidad genera algunos intereses y multas. Atención, algunos retrasos son renegociables, aunque el contribuyente deberá pagar intereses sobre el tiempo de retraso.